Quiénes somos
Fueron nuestros estimados socios y familiares, los que a través de generaciones laboriosas respaldaron nuestro esfuerzo. Desde aquellos abuelos argentinos o inmigrantes que inculcaron sus sucesores, hijos y nietos, las bondades del ideal cooperativo. Desde aquellas largas jornadas de «sol a sol» abriendo surcos de Patria de precariedad de semillas y herramientas. Luego sus hijos, seguidores inmediatos de la generación intermedia, que mejoraron sus planteles en la medida de sus posibilidades, con esfuerzo denodado y férrea voluntad. Y finalmente los nietos de hoy, que heredaron de aquellos su espíritu de lucha, e innovaron maquinarias, sistemas de laboreo y comercialización, en concordancia con las exigencias del nuevo siglo.
 
															El aguerrido espíritu de lucha del campesino y su familia, sumado a una inquietud permanente por mejorar sus condiciones de vida dignificado el fruto de su esfuerzo, motivó su inserción en el quehacer Cooperativo, por entonces, no muy difundido en el País.
Pero como auténticos pioneros y conocedores de este beneficioso sistema de Cooperación, la decisión no tardó en concretarse. Con el auspicio de A.C.A. (Asociación de Cooperativas Argentinas), la unidad de acción entre agricultores de la zona fue el decisivo camino a seguir. El acertado nucleamiento en una entidad Cooperativa, capaz de contener sus ansias de progreso prodigando apoyo y defendiendo sus ideales, era como brújula encantada, indicando firmemente el «norte» a seguir. Fue una postura realmente positiva, no exenta de decisión y coraje, con la que aquellos 45 agricultores de la reunión inicial, parecieron responder al legado del Martín Fierro: «LOS HERMANOS SEAN UNIDOS».
Como modesto homenaje a los referidos pioneros fundadores, transcribimos textualmente el párrafo inicial del ACTA FUNDACIONAL y la nominación de integrantes del PRIMER CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN.
En Armstrong a los nueve días de Agosto de mil novecientos cincuenta y tres, reunidos bajo los auspicios de la Asociación de Cooperativas Argentinas, los agricultores que firman al margen, después de escuchar las amplias explicaciones de los beneficios que aportará a los mismos la constitución de una Cooperativa Agropecuaria, elocuentemente expuestos por el Sr. Presidente de dicha Asociación don Celestino Sienrra (hijo) resuelve por unanimidad la constitución de una Sociedad Cooperativa que se regirá por los siguientes Estatutos.
Cooperativa Agropecuaria de Armstrong
La primera Gestión Gerencial se confió a Pochettino. Las actividades administrativas se iniciaron en el local de Antonio Viotto (Sanguinetti esquina Rivadavia) frente a los elevadores de la Junta Nacional de Granos, único espacio de acopio por aquel entonces y con limitado cupo. El primer inmueble fue adquirido a Juan Cuffia. En él hoy se erigen la Balanza y la Celda de Planta Centro. Las instalaciones se ampliaron posteriormente con la compra de terrenos vecinos. En consecuencia, la administración pudo trasladarse al lugar donde hoy se encuentra.
Las primeras épocas no fueron fáciles. En el pueblo no había ninguna sucursal bancaria, por lo cual los socios que confiaban su dinero a la Cooperativa, debían anticipar en por lo menos dos días de la fecha de su retiro para que la misma dispusiera de los valores, que previamente había confiado a la Asociación de Cooperativas Argentinas con sede en Rosario.
Con el transcurso del tiempo la Cooperativa amplio su gama de servicios: operatoria de Seguros con LA SEGUNDA, Cobertura Médica con ACA Salud e Insumos para la explotación agrícola entre otros. Actualmente la Cooperativa es Socio Fundador de ACA BIO, IPA (Integración porcina ACA) y anexo el reciclado de silos bolsas y bidones plástico con la planta que se encuentra en la localidad vecina de Cañada de Gómez.
Desde siempre la tarea de todo Presidente es ardua y agotadora. Mucho más si se trata de entidades como la nuestra, donde la actividades es intensa y la responsabilidad de la conducción es por demás compleja y delicada.
La función del Presidente resulta en todo momento de singular importancia, pues debe intercambiar opiniones y respaldar inequívocamente las resoluciones que en coincidencia con el Consejo de Administración y Gerencia se adopten, en favor de la legión de asociados que confía plenamente en sus cualidades.
Con su diaria dedicación cada Presidente aporta horas de esfuerzos en pro del bien societario, dejando de lado -muchas veces- gran parte del tiempo útil indispensable para sus propios intereses. Al evocar hoy a nuestra GALERÍA DE PRESIDENTES (desde 1953 hasta el presente año), lo hacemos con la inmensa gratitud que se merecen. En ello «estribó» y estriba gran parte de la marcha ascendente que en cada período fue experimentando nuestra Cooperativa, hasta alcanzar este presente promisorio. Con un cálido recuerdo para quienes «debieron partir», y con un fraternal abrazo para quienes nos acompañan en este continuo crecimiento.